The Monkey: Desparrame sangriento

El subtítulo de esta crítica define estupendamente lo que se va encontrar el espectador al ir a ver The Monkey, la nueva película del director de moda en Hollywood, Osgood Perkins (Longlegs), que además se basa en un relato corto de Stephen King, y viene apadrinada en la producción por el maestro del terror James Wan (Aquaman y el reino perdido). Theo James (The Gentlemen: La serie), por partida doble (interpreta a dos hermanos gemelos), y Colin O’Brien (Wonka) son, junto a un mono de juguete, los protagonistas de esta seudo road movie gamberra.

Theo James en The Monkey

Theo James en The Monkey

Tras un prólogo que nos presenta estupendamente ante qué producto nos hemos sentado a degustar, la acción se desplaza hacia dos hermanos gemelos que encuentran un mono de juguete que cada vez que se pone en marcha provoca una muerte cercana. En un momento dado deciden hacer desaparecer al mono y la acción se traslada 25 años despues. La relación entre los hermanos es muy distante pero otra vez el mono aparecerá en escena para hacer de las suyas. The Monkey saca oro de un breve relato incluido en los muchos libros de relatos cortos que tiene el maestro del terror y el suspense Stephen King. Si es verdad que durante su desarrollo puede pecar de algo repetitivo, pero se le perdona pues tiene un ritmo impecable, y sus ajustados 98 minutos pasan como un suspiro. Otro gran acierto es que la cinta está plagada de guiños al escritor de Maine (hay personajes secundarios con apellidos como Torrance o Wilkes, por ejemplo), algo que los fans del autor van a gozar.

Perkins deja de lado la simetría y los cambios de formato de su anterior éxito para centrarse en retratar cada una de las muertes de la manera más sangrienta y divertida posible. En algunos momentos podemos llegar a pesar que The Monkey es un nuevo capítulo de la divertida saga Destino final. A pesar de su estética cuidada (esa ambientación e iluminación muy deudora del cine de años setenta) se nota que estamos ante una cinta de encargo y la dirección es mucho más abrupta y gamberra de lo que podíamos esperar.

Colin O'Brien en The Monkey

Colin O’Brien en The Monkey

El primer tercio de la película está protagonizada por el joven Christian Convery (Sweet Tooth: El niño ciervo) que se desdobla en los dos hermanos con mucha más soltura y engaño que el auténtico protagonista de la cinta, Theo James, que ocupa las dos siguientes partes de metraje y que es eclipsado en todo momento por la otra estrella joven de la función, Colin O’Brien. Pero aún así, James cumple con su cometido de ofrecer cara de panoli ante cada muerte bizarra, y eso en muchos momentos produce muchas carcajadas.

En resumen, sin ser una obra maestra o una cinta de referencia dentro del género, The Monkey cumple con su cometido de entretener y ofrecer un propuesta sangrienta y plausible de las que ya pocas se ven. Es una decente y alargada adaptación de un curioso relato que no daba para mucho más.

Lo mejor: Es muy cafre y sangrienta.

Lo peor: El segundo acto se hace algo reiterativo.

Puntuación: 6/10

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