Nunca he sido un fan absoluto de Woody Allen (Blue Jasmine). Tengo que reconocer que admiro su gloriosa época dorada de Manhattan, Annie Hall o Delitos y faltas, pero que en las últimas que ha hecho sólo ha conectado conmigo en Match Point y Midnight in Paris. Pero ahora vuelve a engatusarme con Magia a la luz de la luna, donde el director neoyorquino vuelve a su faceta más cómica, dejando de lado el drama que últimamente venía presentando en sus cintas. Algo de agradecer, pues el mejor Allen siempre se encuentra en las partes cómicas de las cintas. Tambien ayuda que cuenta con dos protagonistas como Colin Firth (Un largo viaje) y Emma Stone (Gangster Squad: Brigada de élite) en estado de gracia.
Magia a la luz de la luna cuenta la historia de un mago que tendrá que desenmascarar a una clarividente que está haciendo que una familia entera se crea todos las historias que cuenta, lo que no sabe el mago es que al final, quizás, la clarividente le embauque algo más que su razón. Conociendo un poco a Woody Allen y su cine, sabemos que esto al final acabará girando al amor. A una historia de amor mágica. Y es que el bueno de Woody, aunque no consigue una cinta redonda, si que se aproxima a sus mejores cintas. Y es que la película en ningún momento tiene bajones de ritmo, todo va en aumento y rápido.
Desde que empieza la cinta, mostrándonos unos trucos de magia, la cinta mete quinta y en ningún momento se baja de esa marcha. Cada minuto, cada toma y cada plano está pensado al milímetro, jugando en muchas ocasiones con el propio espectador, como si de un truco de magia de tratara. Y es que Allen sabe muy bien como medir los tiempos en sus películas. Aquí lo demuestra en los diálogos, unos diálogos ingeniosos inteligentes y mordaces, que harán que alguna carcajada salga del espectador. Pero claro, al final también lo que más importa en su cine es la historia de amor. Una historia de amor bien hilada y metida, pero que a veces resulta un poco forzada.
Pero esos momentos forzados no se notan tanto debido a la gran química que hay entre Colin Firth y Emma Stone. Los dos están espectaculares. Él como el gran mago descubridor de impostores y ella como la clarividente que tiene a todo el mundo embaucado. Además, con los filtros que ha metido Allen a la cinta, la belleza de la actriz despunta muchos más y su intenso color verde de ojos se te clava. La actriz sigue creciendo poco a poco y actuando con los mejores directores. Él no necesita presentación. Firth ya demostró todo lo que es en El discurso del Rey, donde dio un recital interpretativo.
Magia a la luz de la luna es una vuelta al mejor Woody Allen. Posiblemente no esté entre sus mejores películas, pero si que hará que el espectador tenga una sonrisa durante todo su metraje. Cautivará incluso a quienes no son nada fans del director.
Lo mejor: Colin Firth y Emma Stone, que están espectaculares.
Lo peor: Que en muchos momentos parece que las cosas están forzadas.
Puntuación: 6/10
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