Muchas veces con el cine de terror ocurre algo muy curioso, y es que casi todas las películas de terror que se estrenan son la película más terrorífica de los últimos años. Muchas de ellas son esa película que no te permitirá dormir, que te mantendrá bajo las sábanas durante la noche y esa que te hará pasar un mal rato con la casa a oscuras. Pero lo cierto es que, después de verlas, ninguna alcanza esas cotas de terror tan terrorífico que terminan siendo una decepción enorme. En los últimos años, al igual que con la comedia, el cine de terror se ha caracterizado por retratar el terror de otro modo, de un modo más psicológico y tratando temas actuales para meter otro tipo de miedo. It Follows, Déjame salir, Midsommar, etc… son muchas las películas que han cogido algún tema latente y lo han trasformado en relatos de terror. Heretic (Hereje) hace algo similar y coge la religión, las creencias y la fe para realizar un relato sobre como las religiones se aprovechan de las mentes perdidas, de las mentes que están débiles para llevarlas a su terreno con promesas que muchas veces son mentira. Hereje (Heretic) es un estudio muy bueno sobre eso, pero peca por terminar cayendo en los tópicos del género y tener giros de guion que hacen que termine desinflándose un poco en su recta final.
El cine de terror se podría diferenciar en varios tipos según lo que más predomine en el relato. Por un lado, tenemos las cintas que son puro jumpscare, donde intentar hacer que el espectador salte de la butaca es lo primordial, y cintas de terror donde la atmosfera es lo más importante. Muchas veces se conjugan las dos vertientes dando cintas de terror realmente aterradoras y que consiguen que el espectador lo pase realmente mal. Heretic (Hereje) está en la línea de lo segundo, aunque tiene algún jumpscare suelto, pero juega todo a su atmosfera, a sus actores y a crear en el espectador un dialogo interno sobre lo que está viendo. Heretic (Hereje) ya sienta las bases de lo que va a hablar desde el principio, con una conversación entre dos chicas, testigos de jehová, donde exponen su opinión sobre el porno. De ahí, llegamos a la casa donde se desarrolla toda la acción, un descenso a los infiernos donde en todo momento se pone a prueba la fe de ambas y si merece la pena tener una religión a la que recorrer si las cosas se ponen mal. En todo momento se juega con el tema de la fe, en creer en un Dios y confiar en esa fe para tomar ciertas decisiones. Y todo ello con una ambientación realmente asfixiante, oscura y donde todo es un laberinto.
Hugh Grant ofrece una actuación sorprendente y escalofriante, demostrando una versatilidad que pocos esperaban de él. Su interpretación de un hombre aparentemente amable y culto, pero con una oscura obsesión por el control y la manipulación, es sencillamente brillante. Grant logra transmitir una sensación de inquietud y desconfianza que te acompaña durante toda la película. Sophie Thatcher, conocida por su papel en Yellowjackets, aporta una vulnerabilidad y determinación que contrasta con la frialdad de Grant. Su personaje evoluciona a lo largo de la película, pasando de ser una joven ingenua a una mujer fuerte y decidida. Chloe East, con su carisma y energía, complementa a Thatcher. Su personaje aporta una dosis de humor y optimismo que alivia la tensión de la película. Ambas actrices logran transmitir la sensación de estar atrapadas en una situación cada vez más peligrosa, generando empatía en el espectador y manteniendo la tensión narrativa.
Uno de los aspectos más interesantes de Heretic (Hereje) es su crítica a la fe y a las creencias religiosas. La película plantea preguntas incómodas sobre la naturaleza de la fe, el poder de la persuasión y la manipulación que se puede ejercer en nombre de la religión. Sin embargo, es importante destacar que Heretic (Hereje) no es una película que ataque a ninguna religión en particular, sino que más bien cuestiona la forma en que las creencias pueden ser utilizadas para controlar y manipular a las personas. Si bien la película indudablemente genera tensión y miedo, su enfoque principal radica en explorar la mente de los personajes y las consecuencias de las creencias extremas. La atmósfera claustrofóbica, la manipulación psicológica y el cuestionamiento de la fe son elementos propios del thriller psicológico. Sin embargo, la película también recurre a elementos propios del terror, como la sensación de amenaza constante y algunos momentos de violencia gráfica. Heretic (Hereje) es una película que te hará reflexionar sobre la naturaleza de la fe y el poder de la manipulación. Su ambientación opresiva, la actuación de Hugh Grant y su guion la convierten en una película que no te dejará indiferente, aunque tenga unos giros de guion que pueden hacer que al final no termine de convencer tanto.