Tras los éxitos obtenidos con la “transformación” a imagen real de sus clásicos, Disney recrea en imagen real su película animada más exitosa, El rey león. El rey león (2019) demuestra que el CGI no tiene límites y es capaz de crear un león que resulta tan creíble cantando como andando. Pero la historia en la misma que vimos en 1994 y revisamos constantemente en formato doméstico. El actor y director Jon Favreau (#Chef) es el encargado de llevar a buen puerto esta adaptación que cuenta con las voces en versión original de Donald Glover (Han Solo: Una historia de Star Wars), Seth Rogen (Casi imposible), Chiwetel Ejiofor (María Magdalena), la cantante Beyoncé Knowles-Carter, y James Earl Jones (Rogue One: Una historia de Star Wars) que vuelve a repetir en esta adaptación su papel de Mufasa.
Como si de una obra de Shakespeare, El rey león (2019) cuenta la historia de cómo un joven príncipe felino huye tras la muerte de su rey padre y años después regresa para arrebatar el trono a su despreciable tío. Esta es básicamente la premisa de esta adaptación que recrea prácticamente igual la cinta de 1994. La versión animada duraba 88 minutos y está 118. Esos 30 minutos más son algunas escenas extendidas con diálogos adaptados a la actualidad, una canción nueva, y una nueva escena de lucha entre dos personajes. El resto es lo mismo, incluso los mismos chistes. Aunque también se han suprimido algunos (aquel de las hienas hablando de Mufasa y el miedo que les da solo decir su nombre) pero se han sabido reciclar con otros. Atentos a las nuevas líneas de Pumbaa, sin duda el roba escenas de la película.
Favreau parece que se ha especializado en dirigir “live action” (que es como se llama a estas adaptaciones a imagen real de clásicos de animación). Tras su excelente composición en El libro de la selva (2016) vuelve a repetir la jugada, pero ahora sin ningun personaje humano de por medio. Hay que reconocer que el CGI es impresionante pero la planificación en la mayoría de la película es la misma que en la de animación. Solo tienen que ver el tráiler y ver el número de El ciclo de la vida para darse cuenta. Es verdad que algunas escenas las ha resuelto de manera diferente, como la secuencia donde entonan Voy a ser el rey león, pues se trata de hacerlo lo más realista posible, y aquel número era un festival de luz, colores, coreografía y disfraces. Quizá ese realismo haga que la historia pierda esa magia fantástica que si tenía el original (el número de Scar cantando Preparaos no tiene la misma fuerza y la misma carga política que si tenía la versión de 1994).
En su versión original cabe destacar la gran labor de Rogen como Pumbaa y Billy Eichner (Angry Birds: La película) como Timon. Ambos están a la altura del original e incluso mucho más mordaces que aquellos. Han sabido muy bien actualizar los chistes de esta extraña pareja. Peor suerte corre Ejiofor, quien nos deleita con una voz muy teatral que dista mucho de la inquietante voz de Jeremy Irons (Gorrión rojo) en el original. Beyoncé tiene las frases justas para justificar su canción y su sueldo. Y Earl Jones no solo pasará a la historia como Darth Vader, sino que su Mufasa también es insustituible.
En resumen, El rey león (2019) no es mal producto, pues se limita a rehacer en imagen real una de las mejores cintas de animación de Disney. Volver a escuchar en una sala de cine la impresionante (y ganadora del Oscar) música de Hans Zimmer (X-Men: Fénix Oscura) bien vale el precio de una entrada. Quizá que se haya recreado todo de una manera tan realista le reste algo de emoción al asunto, pero la historia es la que es, y siempre ha sido un cuento bonito, divertido e interesante.
Lo mejor: La recreación en imagen real del cuento clásico mediante un CGI impresionante.
Lo peor: Los números musicales han perdido la fantasía y la locura que había en el original animado.
Puntuación: 7/10