El proyecto de Disney de rehacer todos sus clásicos en imagen real continua. Tras los éxitos de Alicia en el país de las maravillas y Maléfica, ahora le toca el turno a Cenicienta, el inmortal cuento de los hermanos Grimm (aunque la versión Disney se asemeja más a la interpretación de Charles Perrault), que has sido adaptado por Chris Weitz (Un niño grande) y dirigido por Kenneth Branagh (Jack Ryan: Operación Sombra). En el reparto destaca Cate Blanchett (Blue Jasmine) como la madrastra.
Ella esta muy unida a su viudo padre. Un día este decide casarse de segundas con una caza fortunas que tiene dos hijas repelentes. Cuando el padre de Ella fallece, la vida de esta se convierte en… ¿de verdad tengo que seguir? Es el mismo cuento de todo la vida, en su versión Disney años 50. Weitz no ha cambiado ni una coma. Algunos echaran en falta que el lacayo que conduce la carroza era un perro y no una lagartija, pero son pequeños detalles que no alteran el producto final. La historia sigue funcionando, y no se puede decir que este mal escrita, pues ES LO MISMOOOOOO!!!!
Branagh firma su enésimo encargo. El irlandés puede gustar o no, pero hay reconocer que es un director impecable. Aquí traslada el cuento a imagen real conservando todos los detalles. El momento en el que dan las doce campanadas es espectacular, es una traslación perfecta del mítico momento a imagen real. Branagh cumple y con creces, pero no se sale de los márgenes que Disney y el guión le han debido marca.
Mención especial se merece el compositor que habitualmente trabaja con Branagh, Patrick Doyle (Brave). El escocés no solo se basa en la partitura de la película clásica (no falta el mítico, Bibbidi-Bobbidi-Boo), sino que compone uno temas nuevos en perfecta armonía con la actualidad. Una de las partituras imprescindibles de este año.
Con Cate Blanchett haciendo de villana ya nos han ganado. La dos veces ganadora del Oscar es la viva imagen de la madrastra. Es secundaria, pero sus momentos son de aplauso y su presentación maravillosa. Correctos pero quizá un poco sosos son la pareja protagonista, Lily James (Downton Abbey) y Richard Madden (Juego de tronos). Ambos vienen de shows televisivos con mucha audiencia, por lo que aseguran atraer publico. No están mal, pero no apasiona. Después de los sueldos de Branagh, Doyle y Blanchett, había que recortar de algún sitio.
En resumen, Cenicienta (2015) es un producto impecable. Dirección, fotografía, música, actores…todo en ella funciona, pero es lo mismo. Exactamente lo mismo que vimos en 1950 y que ahora podemos recuperar en formato doméstico. La única diferencia es que ahora es en imagen real y las voces no tiene acento sudamericano.
Lo mejor: La labor de Kenneth Branagh, Patrick Doyle y Cate Blanchett.
Lo peor: Que es la misma historia de siempre.
Puntuación: 7/10
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