Imagínense que me he portado mal durante mucho tiempo y para retractarme de ello, o cumplir penitencia, me propongo hacer el camino de Santiago en su totalidad. Pues bien, donde un español ve “una gilipollez” o “una tontuna”, los americanos ven un bonito vehículo para contar una historia de redención, que tanto gusta por aquellos lares. Eso es lo que ocurre en Alma salvaje, una cinta interesante, pero muy reiterativa en su discurso, donde una mujer con un pasado tormentoso decide caminar desde México a Canadá por una ruta preestablecida. La bella y dulce Reese Witherspoon (Mud) se afea y embrutece para interpretar la historia real de Cheryl Strayed, una mujer que completó esta proeza andante.
El novelista, y guionista ocasional, Nick Hornby adapta la novela Salvaje de Cheryl Strayed. La historia recuerda mucho a la narrada en Hacia rutas salvajes, con la diferencia que aquí hay menos retórica y más corazón. A pesar de lo poco interesante que puede resultar la idea de una señora caminando durante casi 2 horas, hay que reconocer que la cinta atrapa, y no se hace aburrida en ningún momento. La historia juega con insertar breves flashbacks que nos cuenta un poco las situaciones que ha vivido y que la han hecho desembocar en ese camino.
Arrancar un película con Witherspoon quitándose una bota y arrancándose una uña del pie, ya merece el precio de una entrada. Jean-Marc Vallée (Dallas Buyers Club) no se corta a la hora de retratar las penurias por las que pasó esta señora. Vallée dota de ritmo una historia que carece de ello. Puede pecar en algunos momentos de repetirse para dejar bien claro que esta mujer hizo las cosas mal y se arrepiente de ello. Una cosa que sorprende es los parajes que muestra. En este tipo de cintas se suele caer en el abuso de mostrar lugares exóticos o llamativos a la vista, aquí se limita a meter los planos necesarios para encuadrar la historia.
Reese Witherspoon tiene un papel de esos que encantan a los académicos americanos. Una mujer que ha estado dando tumbos durante gran parte de su vida, realiza esta aventura como penitencia por ello. Un personaje para el que Reese se ha afeado un poquito dejando de lado su faceta más bonita para mostrarnos su rostro más desangelado. También se pasea por la cinta Laura Dern (Bajo la misma estrella) como la madre de Reese. Un papel agradable de madre sufridora que también gusta tanto a los académicos. Ambos son interpretaciones curiosas pero no sorprenden tanto como otros de este año. Correctas sin más.
En resumen, Alma salvaje es un cinta que tras leer su sinopsis da mucha pereza, pero al sentarse en la butaca es toda una sorpresa, pues es más entretenida de lo que aparenta. Y es que los americanos saben convertir en una diversión, cosas tan simples o aburridas, como un trayecto de algo más de 4.000 kilómetros.
Lo mejor: A pesar de la pereza que da su argumento, es un producto entretenido.
Lo peor: El discurso narrativo puede resultar muy repetitivo.
Puntuación: 7/10