Los estudios de Hollywood siguen buscando nuevas franquicias que explotar en la literatura juvenil, ahora le toca el turno a al primer volumen de saga Vampire Academy de Richelle Mead. Basada en la novela homónima nos llega este pastiche insoportable, muy mal dirigido por Mark Waters (Los pingüinos del Sr. Poper), y peor interpretado por las “niñas monas” que responde a los nombres de Zoey Deutch (Hermosas criaturas) y Lucy Fry (Las sirenas de Mako). Vampire Academy es una cinta desastrosa de la cual se este intentado sacar adelante una secuela vía crowdfunding.
Una vampira noble y su guardaespaldas son obligadas a volver a la academia de la que se escaparon. Allí estarán en peligro constante, ya que hay una batalla entre diferentes razas de vampiros. Paralelamente cada una de ellas vivirá su respectiva historia de amor. Así podemos resumir el guion de Vampire Academy, donde a los 5 minutos de empezar la cinta, ya nos han bombardeado con tanta información que nos hemos perdido. Múltiples razas de vampiros, varios personajes (algunos están ahí para justificar su trama en futuras secuelas), mucho dialogo, situaciones bochornosas de cuasi película infantil, son algunas de las perlas con las que nos deleita el guionista Daniel Waters (Demolition Man).
Si el guión es “cremita”, la dirección tenia que estar a la altura. No hay ningún plano que case con el siguiente en las aburridas y predecibles escenas de acción. ¿Cómo se puede rodar mal una conversación de plano/contraplano? El director Mark Waters parece que no visitaba el plato o estaba demasiado ocupado contando los billetes que se iba embolsar como para preocuparse de colocar mínimamente la cámara. Atentos a los planos de situación que es una imagen congelada, lamentable. Pero el caso es que este señor tiene películas decentes e incluso interesantes en su filmografía como Chicas malas. Incomprensible.
Como apuntaba en la introducción, el casting tampoco ayuda mucho, salvo por el reclamo en los carteles, ya que al ver a semejantes “frescas” es muy posible que uno decida darla una oportunidad, no hay nada más reseñable. Para conseguir atraer a otro tipo de publico han fichado (suponemos que por una buena suma de dinero) a los sobreactuados Gabriel Byrne (El capital) y Olga Kurylenko (Oblivion). El chulazo con melena que responde al nombre de Danila Kozlovsky debuta en el cine americano tras triunfar en su país, Rusia, pero dudo que le volvamos a ver después de haberse rodeado de tanto costra, pues es lo más destacable de la cinta.
En resumen, Vampire Academy es una de las peores películas de esta temporada donde es imposible poder salvar algo. Es un espectáculo bochornoso que dudo convenza a los fans más acérrimos de la novela.
Lo mejor: Nada.
Lo peor: Todo.
Puntuación: 1/10
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