Se puede decir rápido y corriendo, Vamos de polis es bastante mala. Es otra película que tendría que haber ido directamente a DVD pero no sabemos el porque no lo ha hecho. Si es cierto que tiene algún toque de gracia y algunos momentos de lucidez, pero todo lo que se ve en ella se ha visto en tantas y tantas películas que ya cansan. Luke Greenfield (Algo prestado) ha intentado copiar, por así decirlo, Infiltrados en la universidad. Pero la principal diferencia entre una y otra es que la primera no tiene gracia y la segunda no paras de reír. De hecho, esta Vamos de polis podría ser perfectamente una de las referencias que hacen al final de Infiltrados en la universidad en los créditos.
La historia en sí es un poco surrealista. Dos amigos de 30 años asisten a una fiesta de disfraces, vestidos de policías, para olvidar que su vida no está dando el giro que ellos quieren. Tras la desastrosa fiesta, los dos pasean por la calle dándose cuenta que todos piensan que son polis. Es entonces cuando comienzan a hacerse pasar por polis para divertirse, sin darse cuenta que un mal giro puede hacer que su vida corra peligro. Quizás lo más divertido de la cinta sea el inicio de la misma, cuando durante unas vistas de la ciudad de Nueva York, suena la canción I want it that way de los Backstreet Boys. Después de eso, la música machacona y las situaciones cómicas comienzan a repetirse sin parar, lo único malo es que muchas de ellas, por no decir todas, no hacen gracia. Los mejores momentos son en la que los dos están vestido de policías y se ponen hacer gamberradas por la ciudad, el resto es simple como saltar a la comba.
Nunca me han gustado las comparaciones, pero si es cierto que esta cinta parece que ha querido engancharse a la moda que ha puesto Infiltrados en la universidad de comedia gamberra americana. La cinta de Philip Lord y Chris Miller es una película que entretiene desde el minuto uno y lo sigue haciendo durante los créditos finales. En cambio, Vamos de polis entretiene poco y aburre bastante. Cansa mucho el tener que ver una y otra vez las mismas situaciones en todas las películas, parece que la falta de originalidad se ha instaurado en Hollywood.
Para protagonizar la cinta, Greenfield cuenta con dos actores que han alcanzado el éxito gracias a las serie de televisión New Girl, ellos son Jake Johnson y Damon Wayans Jr. El primero de ellos es quizás el mejor se lo pasa en la cinta, Wayans Jr. hace un poco de estereotipo y no se le ve disfrutar tanto como a su compañero, el cual lleva también a buen puerto todas las gracias de la cinta. Es una lástima que aparezca por aquí Andy García (Cristiada) pues un actor de su categoría no debería aparecer en estas aberraciones.
En definitiva, Vamos de polis es una película que debería estar en los videoclubs antes que en los cines, pero que no sé sabe muy porque sucede al revés. Una película aburrida y con poco más que aportar a un género que no encuentra el camino para despegar.
Lo mejor: Las partes gamberras del guión.
Lo peor: Es aburrida y no hace mucha gracia. Además, dura casi dos horas…
Puntuación: 2/10
quiero ver la pelicula