Tras las espectaculares recaudaciones conseguidas por Skyfall, los productores de la saga de James Bond vuelven a confiar en Sam Mendes (American Beauty) como máximo responsable de la aventura oficial número 24 del agente británico, titulada Spectre. El resultado no es el esperado y esta nueva misión se salda con un metraje excesivo, un guión trillado, y un casting poco afortunado. Spectre se acerca más a un producto como Quantum of solace que a Casino Royale o la ya citada Skyfall.
Spectre arranca donde acabo Skyfall y continúa el arco argumental abierto en Casino Royale. Bond parece seguir creciendo como agente doble cero y aún sigue buscando venganza por la muerte de Vesper Lynd (Eva Green). Ahora se topa con el ultimo escalón, una organización criminal con la que James tiene un nexo de unión. No entraremos en detalles para que el espectador sea sorprendiendo. El guion esta estructurado como Skyfall, y al igual que aquella hay «mucha paja» (si, la anterior aventura de Bond podría haber durando algo menos) que solo pretende alargar la trama sin más. Pistas que llevan de A a B y de B a C, cuando directamente se puede ir de A a C. Por ejemplo, todo el prólogo lleva a Bond a Italia donde allí recibe una pista, y esta le lleva a otra parte del mundo donde hasta Mr. White, un personaje que ya conocemos de anteriores aventuras. Recursos muy sucios para alargar la cinta hasta los 150 minutos. Es verdad que se agradece que la trama englobe a todos los compañeros de Bond (M, Q, Moneypenny…) pero tampoco se saca partido de ello, ya que salen al principio y al final prácticamente. Y la trama de estos, la vigilancia por parte de un organismo superior de todo el mundo (el ya conocido como gran hermano) esta últimamente muy trillada y sino véase Los vengadores. El guion tiene el mismo problema que Quantum of solace, es decir, la acción parece que posee a la historia, y el argumente se ve diluido entre innumerables escenas de acción. Eso si, parece que ya con esta cinta se cierra el arco argumental que engloba las cuatro aventuras (hasta el momento) de Daniel Craig (Munich).
Mendes se da un homenaje nada más comenzar la cinta con un increíble y brillante plano secuencia, sin motivo aparente. Indudablemente al director ingles no se le puede reprochar su talento en la dirección pero en Spectre esta algo descuidada. Carreras de coches que no dan sensación de velocidad, secuencias de tortura aburridas, demasiado uso de efectos digitales… Todo esos defectos denotan prisa por hacer y estrenar la cinta. Y es que Spectre se ha rodado, editado y sonorizado en menos de un año. Se rumorea que el presupuesto de la cinta se ha disparado hasta los 300 millones de dólares (incluyendo publicidad), una locura difícil de recuperar en una temporada plagada de grandes blockbusters.
Daniel Craig esta correcto, como cada vez que hace de Bond, aunque aquí se ha perdido algo de la rudeza y jocosidad que apuntaba en los anteriores capítulos. Las chicas Bond son dos floreros muy monos. Léa Seydoux (La vida de Adèle) es muy guapa pero no convence de chica Bond. Su personaje es un cliché de manual, chica lista metida en el lío que se enamora de James a la primera de cambio. Un chica muy en la tradición de Bond pero alejada de las vistas en las anteriores películas con Craig. De Monica Bellucci (El aprendiz de brujo) no vamos hablar pues sale ¡¡¡6 minutos!!! en proyección. El villano es quien se lleva la peor parte. Ni el personaje esta bien desarrollado ni Christoph Waltz (The Zero Theorem) aplica el terror que tendría que imponer su personaje. Incluso hay momentos que si quitamos el volumen de la cinta podemos imaginarnos a Florentino Fernández poniendo la voz como si del Dr. Maligno se tratara. Una pena.
En resumen, cuando empieza la película se incluye, por primera vez en la época de Craig, el logo original del disparo, por lo que como espectadores podemos pensar que es una aventura de Bond tradicional (ya van 3 cintas contando su origen), y no es así, seguimos con viendo una génesis que parece no quieren terminar de contar, con cierto aire nostálgico que pretende devolvernos a esas cintas tradicionales. Si por lo menos estuviera bien contado, pues nos entretendría, pero no, Spectre aburre, pues todo lo que ofrece lo hemos visto ya, y lo que parecía novedoso no esta bien explicado. Una pena.
Lo mejor: Se cierra el arco argumental abierto en Casino Royale.
Lo peor: Aburre, el villano no funciona bien, y Bellucci sale muy poco.
Puntuación: 4/10