Zhang Yimou (La gran muralla) me ha sorprendido muchas veces. Poco se habla de un director que podría compararse a muchos grandes del panorama internacional. Más bien, qué demonios, es uno de los grandes del panorama internacional. El director chino nos ha dejado obras maestras del cine oriental como La semilla del cristianismo, Qiu Ju, una mujer china, La casa de las dagas voladoras y Hero, entre otros muchos títulos. He de confesar que aún habiendo visto un par de películas suyas de esta década, ninguna me ha gustado tanto como Sombra. Zhang Yimou ha demostrado, de nuevo, la belleza que es capaz al espectador de una manera impecable.
Sombra es bella. Visualmente espectacular. Una puesta en escena sobrecogedora que hacen las delicias del seguidor del director, y de nuevos descubridores de su trabajo. El de Xi’an toca la clave de desproveer a la fotografía de la cinta de color, con una tonalidad de grises que aún no llegando a ser blanco y negro, se le acerca. Si su objetivo era hacer sentir el frío, la lluvia, lo helado del metal y la pena de la pérdida al espectador, lo consigue con creces. Sin duda para mi, este hecho es lo que abandera Sombra, y lo que le hace tan especial.
Aunque por supuesto, no se queda en eso solo. El argumento, la historia, es muy digna de mención. Si es cierto que siempre se nos viene el buscar similitudes con otros títulos del cine chino, en el que también vemos batallas de dinastías. Quizás las distribuidoras deberían esmerarse y traernos algo fuera de ese género. Pero volvamos al caso de Sombra. Un entramado simple, pero que aún así no pierde interés. Diría que tiene su parte onírica, en la que los protagonistas representan personajes conocidos como un rey loco, unos Romeo y Julieta del odio, el mendigo, el amor imposible… sin duda son todos bastantes interesantes y creo que pese a no tener todos un desarrollo o una presentación abundante, podemos imaginarnos su personalidad y conocerlos a través de la intuición.
Sin duda Yimou, rescata lo mejor de sus “antepasados” en el cine de autor chino, y lo mezcla en Sombra. Las escenas de lucha individual son una auténtica maravilla. Coreografías preciosas donde la fotografía, como en toda la película, toma un papel primordial. Nos regala planos, movimientos de cámara y “bailes” que hacen que te quedes con la boca abierta. Todo esto, repito, con las tonalidades que ha elegido, le dan una epicidad sin parangón. Los paraguas metálicos es otro nivel, también.
En definitiva, es una gran película para disfrutar del mejor cine de Yimou, del mejor cine de un director que debería estar mucho más reconocido. Es una apuesta en taquilla que no sé como irá, pero estoy seguro, que no defraudará a nadie. Juga con unas bazas que convertirán a Sombra, espero, en un clásico con el tiempo.
Lo mejor: La fotografía, las escenas de acción, la historia… La mezcla de muchas cosas que hinchan la película de una manera justa y medida para que guste al que vaya a verla.
Lo peor: Quizás, al final, le sobren 15 minutos.
Puntuación: 8/10