Muñeco diabólico (2019): Versión 2.0

En plena era de remakes, reboots, recuelas (mezcla de remake y secuelas)… Hollywood estaba tardando en revisar un producto como Muñeco diabólico, que dio lugar a una saga que dura hasta nuestros días. Muñeco diabólico (2019) se basa en aquella pero con una premisa actual que la convierten en un entretenimiento muy loco y divertido. El director Lars Klevberg (Polaroid) pone delante de la cámara a un puñado de jóvenes desconocidos capitaneados por la adulta Aubrey Plaza (Ingrid Goes West) y cede la voz del muñeco Chucky, en su versión original, al legendario Mark Hamill (Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi).

Chucky y Gabriel Bateman en Muñeco diabólico (2019)

Chucky y Gabriel Bateman en Muñeco diabólico (2019)

En la película original, escrita por Don Mancini, un asesino realiza un rito vudú antes de fallecer y traspasa su alma a un muñeco. Aquí la historia es otra y mejor no conocerla para llevarse la sorpresa y reírse, ya que la primera escena marca un poco el tono de verbena loca que es Muñeco diabólico (2019). El resto de la cinta también es completamente diferente salvo en la esencia del muñeco haciendo perrerías. Es un guión que no se toma en serio a sí mismo y eso es lo hace de Muñeco diabólico (2019) un cinta muy disfrutable. Si la cinta se hubiera tomado más en serio el tema de las nuevas tecnologías seguramente carecería de todo el humor absurdo (todo lo que ocurre con una cabeza es delirante) que contiene. Atentos también a esa rampa que da a la basura y donde el personaje principal se deshace de las pruebas de todos los crímenes. Un guiño fascinante a las cintas de terror de videoclub de los años ochenta.

Klevberg no ha reparado en sangre y nos invita a un festival de casquería a la antigua usanza. Violencia divertida donde se homenajea a la cinta original, a La matanza de Texas 2…, y donde hay muertes muy elaboradas para provocar la carcajada en el espectador (atentos a la del portero del edificio). La película ha contado con un presupuesto alto para este tipo de cintas (10 millones de dólares) que no cuentan con grande estrellas. Esto ha sido debido a que han tenido que rodar material extra para arreglar cosas y que la película funcionara. Esto se suele hacer muy amenudo, y no siempre queda bien, pero en esta caso podemos decir que es la excepción que confirma la regla.

Gabriel Bateman y Brian Tyree Henry en Muñeco diabólico (2019)

Gabriel Bateman y Brian Tyree Henry en Muñeco diabólico (2019)

Gabriel Bateman (Nunca apagues la luz) es el encargado de interpretar a Andy, el niño al que le regalan el muñeco. No estamos ante un gran interpretación, pero funciona perfectamente para dar la réplica a la inquietante voz de Hamill. El actor que se hizo famoso por encarnar a Luke Skywalker tiene muchas tablas en esto del doblaje. Es la voz del Joker en las películas de animación de universo DC. Plaza interpreta un papel más serio de lo que nos tiene acostumbrados y es consciente del producto en el que está. Brian Tyree Henry (Viudas) interpreta al policía de la función, que cuida de su madre, y da lugar a situaciones muy divertidas.

En resumen, Muñeco diabólico (2019) es una cinta que parece que la única pretensión que tiene es entretener, y lo consigue. ¿Podría haber sido más crítica y mordaz con las nuevas tecnologías? Por supuesto. Aún así, se aleja lo suficiente del original para que los más longevos disfruten de esta nueva versión y tiene un punto actual, que hará las delicias de los espectadores más jóvenes.

Lo mejor: Es muy loco y divertida. La voz de Mark Hamill

Lo peor: Han perdido una buena oportunidad para criticar toda la tecnología que nos rodea a diario.

Puntuación: 6/10

 

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