Margaret es la nueva cinta del director y guionista Kenneth Lonergan, quien con su opera prima, Puedes contar conmigo, recibió el aplauso de la critica y fue galardonado con premios en varios festivales. Margaret intenta seguir esa estela y se queda muy atrás, y en parte es debido a su larga duración, ya nos encontramos ante una cinta de 150 minutos.
Hay veces donde una larga duración puede ser necesaria e incluso justifica, pero Margaret no es el caso. Margaret es la historia de una chica que debido a un capricho cambia su destino y el de algunas personas más. Esto ocurre durante el primer tercio de la cinta, luego la cosa se complica y da un par de vueltas muy parecidas para luego acabar de la manera más lógica posible. Todo esto otros guionistas hubieran tardo mucho menos en contarlo. Lonergan parece que esta contando la historia más grande jamás contada.
Indudablemente estamos ante una cinta que para muchos será una gran obra por lo que trata de contar, el despertar de la conciencia de la juventud, el sentimiento de culpa, y la capacidad de reacción, pero para el publico más general puede ser muy difícil de digerir, y más teniendo en cuenta que cada escena parece una película e una historia en así, y sino atentos a la relación de la protagonista con el pequeño de la familia Culkin, Kieran (Scott Pilgrim contra el mundo), un episodio que si lo borramos de la cinta no pasaría nada.
Como director Lonergan cumple en lo que a planificación se refiere. Estamos ante una cinta independiente y a pesar que hay momentos muy pedantes, hay bonitos encuadres. El problema de esto radica en que los planos son excesivamente largos, los deja reposar, parece como que quiere que contemplemos cada imagen como si de un cuadro se tratara, y el cine no es así, salvo que se exhiba en otros lugares que no sean salas comerciales.
En el reparto encontramos a una esplendida Anna Paquin (El piano), que a su edad 32 años, todavía consigue pasar por una adolescente de 18, y no solo eso, sino que los aficionados a las serie True Blood, es muy posible que queden asombrados con su cambio físico. Por la cinta también se pasean, y digo se pasean por que son papeles muy secundarios, de esos que parecen que han pasado a tomar café al rodaje y se han rodado unas escenas como pago por ello, Matt Damon (El caso Bourne), Mark Ruffalo (Los vengadores), Matthew Broderick (Todo en un día), Jean Reno (León, el profesional). Sin duda un buen reclamo de cara a la cartelera, pero tremendamente aburridos. Quizá Broderick este un poco más interesante, pero ninguno logra despertar la atención del pernoctado espectador.
En resumen, indudablemente Margaret tiene su público, pues reúne todos los requisitos de película de bajo presupuesto, pero no es cine independiente del bueno y agradable, y salvo Anna Paquin, aunque hay momentos en los que puede poner de los nervios, todo lo demás puede causar somnolencia.
Lo mejor: Anna Paquin.
Lo peor: Su duración.
Puntuación: 3/10