La invención de Hugo es una maravilla visual gracias a su director Martin Scorsese (Uno de los nuestros), que consigue un 3D fabuloso. Lastima que el guión se convierta en un batiburrillo, que empieza como un cuento para niños, para acabar siendo un cuento para adultos.
Sin lugar a dudas debemos bajarnos la gorra ante el maestro Scorsese por conseguir adaptar su lenguaje al 3D sin perder su esencia, pero no solo eso, también consigue que este formato brille en su esplendor. Desde el impresionante plano secuencia que abre la película, muy típico del director neoyorquino, hasta la composición de los planos de los músicos de la estación, que usa a manera de cortinillas, todos están preparados para uso y disfrute de la cinta en su formato más novedoso.
Asa Butterfield y Jude Law en La invención de Hugo
Hugo Cabret es un niño huérfano que vive en una gran estación de tren en París. Para salir adelante vivirá mil aventuras en esta estación de tren, y tratara de dar con la clave de un viejo robot autómata que encontró con su difunto padre. Esta premisa, tan aventurera e interesante, a mitad de largometraje se convierte en otra historia, una historia sobre el nacimiento del cine, que si bien es maravillosa dista mucho de lo que empezaba contándonos. Aunque una es una conclusión de la otra, ¿por qué el niño protagonista deja de ser el protagonista?
John Logan (El ultimo samurai) adapta el libro infantil (con mas dibujos que palabras) de Brian Selznick, pero no que el espectador termine enfatizando con el debido al problema antes comentado.
Técnicamente la película tiene una factura impresionante, desde la fotografía pastel de Robert Richardson, habitual director de fotografía de Scorsese, hasta la impresionante partitura de Howard Shore (Se7en) quien se ha basado mucho en los músicos parisinos, y ha usado mucho la guitarra, en especial para esas transiciones antes mencionadas.
Asa Butterfield y Ben Kingsley en La invención de Hugo
En el apartado artístico, todos los actores están divinamente pero hay que destacar por encima de todos a Ben Kingsley (Gandhi), pues tiene una responsabilidad muy importante, y lo borda. La revelación de hace unas temporadas Chloë Grace Moretz (Kick Ass) sigue demostrando que de mayor va ser una excelente actriz, y su compañero, y protagonista, Asa Butterfield (El niño con el pijama de rayas) consigue estar a su altura, por lo que también habrá que seguirle de cerca.
En resumen, estamos ante el ejemplo de un director de vieja escuela como es Scorsese, que se ha adaptado a las nuevas tecnologías estupendamente, demostrando a la nuevas generaciones que no todo es arrojara objetos a los espectadores, sino que se puede hacer cine en 3D con buen gusto. Lastima que la historia no este a la altura de la factura de la película, pues podía haber sido una película redonda y no lo es.
Lo mejor: La dirección de Martin Scorsese
Lo peor: El guión de John Logan
Puntuación: 7/10
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