La gran aventura de Winter el delfín: Historia de superación para toda la familia

Inspirada en hechos reales nos llega esta aventura de superación protagonizada por un delfín que carece de cola. Es una producción para toda la familia que viene firmada por Charles Martin Smith, más conocido por su labor de actor, en películas como Los intocables, que como director.

Winter en La gran aventura de Winter el delfín

La película es un telefilm que juega con recursos muy de libro para que enfaticemos con los personajes y salgamos de la sala con un buen sabor de boca. Un chaval de familia desestructurada tiene que asistir a clases de verano, y no se siente cómodo, un día ve que un delfín ha varado y cuida de él hasta que llegan los miembros de un acuario para ayudarle. Ni que decir tiene que el niño dejara el colegio, donde se intuye sufre acoso escolar, para ayudar a los miembros del acuario a cuidar del delfín, al que tienen que amputarle la cola. La historia sigue con muchas tramas, pues hay muchos actores secundarios y todos tienen su historia. Llaman la atención algunas de ellas como la de alistarse en el ejército o perder un miembro del cuerpo, que puede parecer duro para un niño, pero en el film lo suavizan.

La cinta no está mal rodada, pero carece de los medios de una superproducción por lo que en muchos planos, en especial al principio, se nota mucho el efecto digital, y cuando es un objeto inherte, pues cuela, pero cuando es un delfín, hasta el espectador más pequeño se da cuenta del truco.

Fotograma de La gran aventura de Winter el delfín

Los principales protagonistas de la cinta son el delfín Winter, que se interpreta a si mismo, y el niño Nathan Gamble (Miedos 3D), pero están rodeados por un elenco de actores algo acabados como Harry Connick Jr. (Copycat), Ashley Judd (Doble traición) o Kris Kristofferson (Blade).

También esta Morgan Freeman (Se7en), que da un poco de pedigrí al asunto, pues este hombre está bien aun recitando el menú del día. Curiosamente interpreta un papel que en la realidad fue un hombre blanco. Son las licencias que ciertos productores se toman cuando ponen “Inspirada en hechos reales”. También destacar al “roba planos” de la película, y generador de aplausos en la platea, el pelícano Rufus, que siendo un mero animal secundario va ser quien se lleve toda la fama de la cinta.

En resumen, es una película de sobremesa con buenas intenciones, que incluye todos los tópicos del género, dirigida mayormente a un público infantil, que a pesar de durar casi dos horas no aburre. Como siempre digo con este tipo de películas, la última palabra y juicio, deberían tenerla los niños que es el público al que va dirigido.

Lo mejor: Rufus, el pelícano.

Lo peor: Los efectos digitales.

Puntuación: 5/10