Kick-Ass 2 – Con un par: Golpea pero no noquea

Tras la sorpresa cinematográfica que supuso la adaptación de Kick-Ass de Mark Millar y John Romita Jr. por parte del director ingles Matthew Vaughn (X-Men: Primera generación) no era de extraña que se siguieran adaptando sus siguientes aventuras. 3 años después de aquella joya, que se tomo muchas licencias con el comic, nos llega su secuela, Kick-Ass 2 – Con un par, que se basa en el segundo volumen de las aventura de este justiciero enmascarado y en la precuela de este, titulado Hit-Girl. Ahora dirige Jeff Wadlow (Rompiendo las reglas) y produce Vaughn, quien no se pudo poner tras las cámaras por estar enfrascado en la preproducción de X-Men: Días del futuro pasado, que finalmente tampoco dirigirá.

Aaron Taylor-Johnson y Chloë Grace Moretz en Kick Ass 2 – Con un par

Al igual que su predecesora en Kick-Ass 2 – Con un par también se han tomado muchas licencias con respecto al comic. Si bien la cinta comienza como un híbrido entre los comics antes mencionados, cuando llega a su ultimo tercio no se parece en nada a ninguna de las dos aventuras. Han pasado un par de años de lo acontecido en la primera entrega, Hit-Girl y Kick-Ass van al mismo instituto pero la primera se ve obligada ha abandonar su vida de justiciera nocturna para complacer al mejor amigo de su padre que fue quien la adopto tras la muerte de este. Por su parte Kick-Ass entrara a formar parte de una banda de justicieros donde se encontrara más de una sorpresa. Y Bruma Roja regresara como El Hijoputa, el supervillano que pondrá en jaque a nuestros protagonistas. Esta claro que el universo cinematográfico de Kick-Ass, al igual que el de Los vengadores sigue por otro camino, pero manteniendo la esencia del comic. En esta caso, la mala leche del comic ha quedado más diluida que en la primera entrega, y el guión naufraga en algunos momentos sin saber muy bien lo que quiere Jeff Wadlow contar.

Tampoco ayuda mucho la irregular realización de Jeff Wadlow, quien tiene momentos de lucidez, como la pelea en la furgoneta, y momentos muy malos, como cuando la villano rusa hace de las suyas en una calle residencial. Hay momentos donde Kick-Ass 2 – Con un par parece una película de cine y momentos donde parece una película para televisión, algo que ha día de hoy, en Hollywood debería estar mucho más controlado. Si a esta absurda realización le sumamos el abuso de efectos digitales que se notan mucho, tenemos un producto bastante triste, que sorprende haya llegado a la gran pantalla.

La banda sonora de la primer entrega era una autentica delicia, pero cuando aquí todo suena igual, y el único tema que suena nuevo tiene cierto tufillo al tema central de X-Men: Primera generación, me da la sensación que el compositor Henry Jackman  (Juerga hasta el fin) sabia donde se metía y pensó: “¡Para que esforzarme!”.

John Leguizamo y Christopher Mintz-Plasse en Kick Ass 2 – Con un par

Menos mal que el casting se salva bastante, empezando por esa ninfa que ya ha crecido y no pueden ocultarlo llamada Chloë Grace Moretz (La invención de Hugo), quien, como en la primera entrega, vuelve a tener grandes momentos, como el del baile de animadora o la secuencia de la furgoneta antes mencionada, y Aaron Taylor-Johnson (Salvajes) quien parece haber nacido para ser el “looser” de Kick-Ass. Christopher Mintz-Plasse (Supersalidos) vuelve a estar correcto, y cada vez que John Leguizamo (Atrapado por su pasado) le da la replica son momentos para aplaudir. La nueva y sonada incorporación de esta secuela, Jim Carrey (Dos tontos muy tontos) queda demasiado anecdótica.

Kick-Ass 2 – Con un par es una cinta flojita pero que no aburre, se deja ver, pero esta muy lejos de su predecesora y aun más del comic en el que se basa. A pesar de que han cambiado el final con respeto al tebeo, se sigue manteniendo abierta la puerta para secuelas, que si van a ser de esta manera, mejor que las lancen directamente en DVD o en plataformas digitales.

Lo mejor: Chloë Grace Moretz

Lo peor: A pesar de no aburrir cuando sales de la sala tienes la sensación de que no te han contado nada.

Puntuación: 4/10