Géminis: Tecnología punta

Ang Lee (Billy Lynn) ganador de dos Oscars de la Academia de Hollywood a mejor director, el último por La vida de Pi, parece estar perdiendo la cabeza por las nuevas tecnologías. Algo que ya le ocurrió a principios de siglo al bueno de Robert Zemeckis (Forrest Gump) cuando empezó a “jugar” con la animación y el 3D. Ahora el director taiwanés ha querido repetir la fallida apuesta de su anterior cinta dramática pero con una de acción, es decir, rodar en 4K a 120 fotogramas por segundo y en 3D. Algo para lo que los cines de este país (y muchos otros) no están preparados. Recordemos que el 3D no termina de cuajar como invento, y que por lo general acelerar la imagen a más fotogramas de lo normal (24) muestra una definición, que unida a la calidad 4K, puede resultar tan realista que nos saque de la historia que se esté contando (esa sensación de ver la acción como si realmente fuera un directo donde todo el decorado da la impresión de ser más artificial de lo que es). Pero al margen de esta tecnología, Géminis es un producto fallido, antiguo, y que no termina de funcionar como debería. Ni la carisma su protagonista, Will Smith (Aladdín (2019)), salvan a Géminis de ser uno de las peores productos de 2019.

Will Smith y Mary Elizabeth Winstead en Géminis

Will Smith y Mary Elizabeth Winstead en Géminis

Géminis es un proyecto que lleva dando vueltas por Hollywood desde el siglo pasado. Su idea es de aquel entonces, y estaría bien para una cinta de las llamadas “estreno en videoclub” pero para salas de hoy en día queda algo obsoleta. Un asesino a sueldo que decide retirarse debe enfrentarse a un último reto, él mismo en un versión más joven. No revelaremos más sobre esta trama donde todo se ve venir, incluso su ¿sorprendente? giro final. La historia no tiene más. Unas idas y venidas de ambos personajes luchando entre sí para dar pie a un ejercicio técnico sin precedentes.

Y es que la parte más interesante de Géminis es el uso de los 120 fotogramas por segundo y las 3D por parte de su director, quien parece que está haciendo pruebas con esta y su anterior cinta para ofrecernos en breve una obra a su altura. Es interesante por la combinación de ambas técnicas y por ofrecernos imagen muy nítidas y luminosas en condiciones poco favorables (la secuencias en las catatumbas así lo demuestra). La escenas de acción son correctas y en general pretenden ser espectaculares pero tampoco son tan impresionantes como realmente esperábamos, más allá de la profundidad de campo que ofrecen las 3D y el 4K.

Clive Owen y Will Smith en Géminis

Clive Owen y Will Smith en Géminis

Will Smith en su doble faceta de cincuentón y jovenzuelo está simpático para un papel que debería tornar más en la línea de tipo serio. Tampoco ayuda que los secundarios muestren más gracietas de las habituales y que el villano de la función se pase de sobreactuación. Ahí tenemos a una ¿estrella? que no terminó de brillar llamada Mary Elizabeth Winstead (Calle Cloverfield 10); un secundario cuyo nombre en la ficción (Baron) ya puede provocar carcajadas en la platea, me refiero a Benedict Wong (Vengadores: Endgame); y por supuesto, un señor inglés que también gozó de mucha popularidad en otra década, Clive Owen (Valerian y la ciudad de los mil planetas).

En resumen, Géminis es un cinta que le puede servir a su responsable como ejercicio de prácticas pero al gran público le va dejar con cara de sorpresa. No se si será por la historia o por la técnica que se ha usado para su grabación pero es raro que este tipo de producto sea capaz de convencer a cualquiera. Una pena, pues su productor es Jerry Bruckheimer (12 valientes) del que, al menos, siempre se espera un espectáculo entretenido. Géminis no es ni eso.

Lo mejor: La luminosidad que dan las cámaras que Lee ha usado para grabar la cinta.

Lo peor: Todo lo demás.

Puntuación: 2/10

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