A veces, nos ponemos metas que no sabemos si podremos llegar a realizar. Por unas cosas o por otras, las creemos altamente dificultosas o imposibles. Aunque quizá imposible es una palabra muy fuerte, una palabra a la que tenemos sobrevalorada. No obstante, debemos saber que hay muy pocas cosas imposibles en este mundo. Yo me he dado cuenta de ello cuando he visto Gabor, una película documental del argentino Sebastián Alfie, que nos cuenta el gran logro de un hospital oftalmológico en La Paz, Bolivia, donde se consigue devolver la vista a algunos que sufren de ceguera.
Gabor Bene en Gabor
Pero no es una película documental corriente, ni cualquiera. En ella también se cuenta la historia de Gabor, el director de fotografía de esta película en cuestión, y que da título a la misma. ¿Por qué?, pues porque por culpa de un glaucoma, quedó completamente ciego. Si, el director de fotografía es ciego. Al principio, Sebastián Alfie, que ha sido el director y narrador de esta bonita historia, nos cuenta que se puso en contacto con Gabor para alquilarle una cámara, y que forjando una amistad, decidió ofrecerle el puesto de director de fotografía en su película documental, puesto que no aceptó sin antes dudar. Pocos creían en que pudiera, teniendo en cuenta que es ciego, que va a ejercer de director de fotografía, y por supuesto por las condiciones que conlleva un rodaje en un lugar como La Paz, pero Gabor pudo y lo hizo.
Sin duda todo esto es bastante increíble, y es una historia de superación y de que querer es poder bastante conmovedora, pero no creo que al final la película se acabe centrando en uno de los objetivos. Yo particularmente, no entendí si el propósito final de Alfie, con su película, era concienciar nos sobre el paso del calvario a la ilusión de poder ver de esos incidentes de La Paz, o contarnos la historia de Gabor. Tal vez ha querido hablar de las dos, pero por ello se ha quedado un poco a medias de ambas. A eso se suma que el director también ha querido meter todas las dificultades del rodaje, y todo acaba siendo un poco batiburrillo. Más que una película documental, es un documental sobre una película documental.
Gabor Bene y Sebastián Alfie en Gabor
De todos modos creo que siempre que haya oportunidad, es necesario contar una historia como la de Gabor. Siempre es agradable ver como la gente que tiene obstáculos en esta vida, se levanta y los supera. Alguien que se queda ciego, en una etapa de su vida en la que tiene aún mucho por delante, y una hija a la que ver crecer, no estaría menos que devastado. Sin embargo, una cura de humildad como la que nos proporciona Gabor no viene nada mal. ¿La verdadera pena de todo esto?, que tal y como están las cosas aquí, dudo mucho que haya mucha gente que una película como Gabor le impulse a rascar la cartera. Lo mejor sería el boca a boca, que en estos casos es lo que mejor funciona.
Lo mejor: La lección de vida y se superación de su auténtico protagonista.
Lo peor: Alfie ha querido abarcar demasiado, quizás quedando superado.
Puntuación: 6/10
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