Cuñados: Todo queda en familia

En un año tan complicado como ha sido 2020, y lo está siendo 2021, que el cine haya abierto la puerta a estrenos menos comerciales y más independientes es una noticia que celebrar a lo grande. Y también que haya cabida para propuestas mucho más territoriales, más marcadas en una provincia. Desde hace unos años, películas como Loreak, Handia, Verano 1993, Los días que vendrán han demostrado que el cine vasco o catalán está entrando con fuerza en las carteleras de toda España y que tienen éxito fuera de nuestras fronteras. Por ello también es bueno ver que hay cine que viene de otras provincias como Galicia. Cuñados es una cinta puramente gallega, rodada en su idioma y en Ourense. Dirigida por Toño López y protagonizada por Miguel de Lira, Xosé A. Touriñán y Federico Pérez Rey, la cinta es una cinta simpática, divertida y que intenta dar voz a algunos problemas que pueden encontrarse en la sociedad actual hoy en día, como es la corrupción de las grandes corporaciones que solo buscan su propio beneficio dándoles igual si aplastan o hacen daño a los más desfavorecidos.

Xosé A. Touriñán, Federico Pérez Rey y Miguel de Lira en Cuñados

Xosé A. Touriñán, Federico Pérez Rey y Miguel de Lira en Cuñados

Todo se desencadena cuando una asegurado les reclama 250.000 a Eduardo y Sabonis, unos cuñados que han metido la pata en uno de sus negocios. Pero Sabonis no está dispuesto a echar todo por tierra por lo que decide secuestrar a Modesto, el cuñado de la jefa de la aseguradora para reclamarles el rescate. Desde ese momento la cinta se convierte en una comedia loca donde cada paso que dan nuestros protagonistas es más loco que el anterior. Tan loco que terminarán trabajando juntos para hacer que la cuñada de Modesto sea capturada por los chanchullos que se trae. La cinta, como he dicho antes, es divertida, dinámica y que te mantendrá con una sonrisa en la cara. La historia puede no ser una novedad muy grande, pues es una argumento que se ha visto en más de una ocasión en la gran pantalla, pero que al darle el toque rural de Ourense la engrandece. Porque la cinta no busca otra cosa que no sea entretener durante los poco más de ochenta y cinco minutos que dura. Y ese es otro punto a favor de la cinta.

Quizás lo único que se le puede poner como una gran pega sea que todo se termina solventando de una manera rápida, sin demasiadas explicaciones y que dejan al espectador un poco perdido en algunas cosas. Y tiene algún bajón en el ritmo que puede hacer que se pierda parte del interés que se estaba teniendo. Pero bueno, el final de la cinta es tan loco, tan divertido y con un final feliz que hacen que estas cosas se perdonen. En definitiva, Cuñados es una película perfecta para pasar el rato, olvidar los problemas y reírse de todo. Es una cinta que no busca más que eso, que el espectador pase un buen rato. Las interpretaciones cumplen con su propósito y hacen que nos creamos casi todo lo que ocurre en pantalla. Lo dicho, si quieres pasar un buen rato en este año donde las risas parece que no salen fácilmente, Cuñados es tu película.

Responder

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Share This