Bella (Kristen Stewart, (Blancanieves y la leyenda del cazador)) debe afrontar su nueva realidad: ahora es un vampiro y además debe cuidar de Renesmee, un bebé con unos dones muy especiales. El clan Volturi se conjurará para acabar con la amenaza que la niña representa, y la familia Cullen deberá unirse más que nunca para protegerla.
Desde el punto de vista de alguien que para nada es seguidor de esta saga, a la hora de enfrentarse a esta última parte hay que tener algo muy claro: estamos ante un producto dirigido hacia un público menor de edad y en su mayoría de género femenino; parece algo obvio, pero juzgarlo como una película con otro tipo de pretensiones, seguramente sea injusto. Partiendo de esta premisa, que podría ser criticada en sí misma como algo que le quita cualquier interés y seriedad al producto, podríamos decir que la película está más o menos correctamente resuelta, pues no pretende nada más allá que entretener por un rato y si puede ser, seguir estirando la gallina de los huevos de oro. Sin embargo, es difícil para mucha gente hacer el esfuerzo de situarse en este punto, y es comprensible.
Como producto de entretenimiento que ha tenido tal éxito, también económico, se le podría exigir un poco más en muchos aspectos, sobre todo en los técnicos. Los efectos especiales como mucho llegan a pasables en algunos casos; los lobos (relegados a un segundo plano, casi anecdótico) a veces son creíbles, y otras resultan demasiado falsos, sobre todo en aquellas escenas con demasiada luz ambiental, pero son un lujo comparados con el bebé protagonista; incomprensible cómo se complican la vida algunas veces para representar en una película algo tan a mano. A todas luces habría resultado mejor que apareciese un niño real…pero igual había que justificar algún presupuesto, quién sabe. El diseño de personajes es muy desigual, el vestuario de los protagonistas sigue teniendo escasísima importancia, y tratándose de vampiros superhéroes, el carisma se resiente, y mucho (la normalidad de las vestimentas quizás se deba a una intención de que el espectador se pueda identificar mejor con los protagonistas, por justificarlo de alguna manera). En cambio, el vestuario y maquillaje de los villanos de turno parece mucho más trabajado, aunque contrasta demasiado con sus antagonistas, por antiguo y recargado; de todas maneras, cumple, dando un aire maligno pero con cierto toque simpático al clan rival…
La dirección de Bill Condon (Dioses y monstruos) parece hecha con el piloto automático, seguramente la cosa no merecía mucho más, y consigue crear cierto momento de clímax que por exigencias de guión queda en gran chasco, seguramente imperdonable; y es que con una mínima reflexión, la acción que ocurre en toda la película podría resumirse en un reclutamiento de dos pequeños ejércitos que al final… digamos que no se emplean a fondo, por no revelar en exceso. La violencia del film en algún momento es incluso llamativa, ya que en el resto a penas hay nada; eso sí, no veremos ni una gota de sangre (en una película de “vampiros”), por lo que resulta totalmente artificial, e incluso extraña, como si las cabezas que se desprenden de los cuerpos fuesen corchos de botella (vacía, claro).
Las actuaciones, como el resto de elementos, pasan sin pena ni gloria. Robert Pattinson (Cosmópolis) vuelve a hacer un muestrario de muecas y resoplidos que pretenden ser sonrisas, lo malo es que no sabes si se está riendo de su novia, de él mismo, o del espectador que esperaba algo un poco más serio. Kristen Stewart resulta un poco más creíble, aunque no llega a transmitir tampoco ni siquiera ternura o reflexión y asimilación de su nueva condición de vampiresa, y de madre, menos. Taylor Lautner (Sin salida) en esta entrega se va escondiendo poco a poco hasta aparecer sólo en forma de lobo amenazante, pero de lejos; eso sí, hay un levantamiento de camiseta con lucimiento de tableta que funciona casi a modo de chiste sobre su personaje y también como digna despedida, o no tanto… El clan enemigo, sin embargo, cuenta con unas actuaciones un tanto más consistentes, aunque el hecho de que lleven un vestuario y un maquillaje más trabajados y que no aparezcan demasiado en pantalla, juega sin duda a su favor. Dakota Fanning (El fuego de la venganza), con sus escasos planos, transmite más espíritu vampiresco que el resto de protagonistas.
Amanecer Parte 2 es ni más ni menos que lo que todos sabíamos; el final de una saga cuyo éxito exigía un mayor esmero en algunos aspectos ya comentados, sobre todo los referentes al apartado visual. No vamos a pedir complejidad o reflexión, pero un poquito de mala leche y sentido del humor habrían sido bien recibidos. El hecho de que el público destinatario de la película sea menor de edad no excluye a los creadores de invertir un poquito más (no será por falta de recaudación) en terminar el trabajo de manera más seria. Aún así, los fans la disfrutarán, y sabrán perdonar algunas “lagunas” que el resto de público no podrá pasar por alto. Entrar a valorar cómo películas de este estilo moldean la mente de nuestros adolescentes, creándoles ciertas expectativas imposibles, sería una tarea interesante, pero ésa es otra historia…
Lo mejor: Algunas escenas de ligera acción y algunos efectos especiales son pasables. El clan Volturi, aunque parece sacado de otra película, tiene cierto empaque. En ciertos momentos, la película parece reírse de sí misma, cosa que se agradece.
Lo peor: Realmente no sucede mucho en la película, y el momento de supuesto clímax se ve interrumpido de una manera que roza el ridículo. La mayoría de efectos especiales no están a la altura de un proyecto de este presupuesto. El final no es tan cerrado como muchos desearíamos…
Puntuación: 4/10
En todo caso, fue algo humorística, en especial Garrett, creo que fue el personaje más carismático en toda la película.
Yo leí los libros, y la parte más lógica me pareció precisamente lo del derramamiento de sangre; ¿Qué sentido tiene que los vampiros tengan sangre si eso es lo que comen? Siempre se me hizo ridículo. Se me hizo más lógico que fueran más como de piedra, secos.
sin embargo, salí decepcionada del cine. Esperaba algo más. Esperaba que después de tanto fracaso, esta ultima entrega fuera algo mejor; la ultima, es la vencida. Pero parece que ni así lo hicieron bien.
Y hay un error caótico en la pelicula. Se supone que Alice no pódía ver en sus visiones ni a Renesmee ni a Jacob, y sin embargo ahí los vemos, en el futuro dándose un lindo abrazo familiar, solo porque les pareció una linda idea. Eso es una ofensa a los fans. Creen que nos vamos a contentar con una película mediocre y mal hecha, solo porque es linda.