
Era complicado saber salir después del final de Spider-Man: Lejos de casa, donde se lanzaba la revelación de quien era el chico detrás de la máscara del trepa muros. También era complicado sobrevivir al hype que se había creado alrededor de una película que apuntaba al multiverso y la aparición de personajes clásicos de la franquicia. Pero Spider-Man: No way...